La Bastida cuenta en sus proximidades con dos piscinas naturales en el seno del río. La pequeña tiene su lecho cubierto por lanchas para que los más pequeños puedan jugar con confianza en su interior. La grande cuenta con una profundidad de 3 metros en el lado del chorro. Entre las dos piscinas existen zonas verdes para poder tomar el sol y tumbarse en el cesped. Además hay múltiples lanchas donde poner la toalla.